La Fundación Juan Brito en colaboración con la Fundación La Caixa y el Cabildo Insular de Lanzarote, presenta un viaje en el tiempo a través de las experiencias de personas mayores, destacando la importancia de la memoria histórica. En este episodio, Vicente Berriel Betancort, nacido en Mala en 1951, comparte sus recuerdos de una vida dedicada al trabajo desde temprana edad, incluyendo la cosecha de cochinilla, un insecto utilizado para hacer tintes, y el cultivo de tabaco. Su relato abarca desde su mudanza a Gran Canaria a los 11 años para trabajar en la hostelería hasta su regreso a Lanzarote y su participación en el desarrollo turístico de la isla, siempre resaltando las dificultades económicas y el valor del esfuerzo personal para salir adelante.
